Hemos comenzado un nuevo verano y
nuevamente queda demostrado que el crecimiento
desmesurado y sin control de la localidad no va en
sintonía con su capacidad para proveer los
servicios básicos. Es así que únicamente hay que
esperar hasta media mañana para que los
ciudadanos orenses vean que, de sus canillas, no
sale ni una gota de agua. De parte del Intendente
Municipal se ha tratado y gestionado la
finalizacion de la toma de agua del puente 83
pero; la respuesta de ARSA fue concreta falta de
financiación. Por su parte, el Partido Provincial
Rionegrino elevó un proyecto de ordenanza para
el uso racional y controlado del preciado fluido
-¿y los concejales?- Lo trataron sacaron una
declaracion y... hasta ahí nos enteramos. Pero
nada da frutos. Los nuevos loteos se siguen
empalmando y la red esta cada vez más y más
diezmada... Y sin una solución a la vista.
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