Como la quieren !!! esbozó una señora que iba camino al almacén y se paró a observar el panorama que mostraba a la "Terrible" Viñas, con la camiseta del "Trueno Verde" y siendo saludada por grandes y chicos.
Mientras tanto, los primeros medios iban llegando y narrando lo que iba aconteciendo desde el cuartel de bomberos, quienes aprestaban detalles para poner a punto la autobomba que la pasearía por toda la localidad. Alrededor de las 11,30 hs partió la caravana con Betiana saludando y mostrando el cinturón logrado hace unos dias en Las Heras, Mendoza ante la uruguaya Paola Ibarra. Mucha alegría y regocijo de todos los vecinos que se apostaban al paso del móvil de bomberos voluntarios para ver y saludar a su hija pródiga. "Queria llorar y no podía" comentaba la boxeadora con relativa emoción. "No lo puedo creer, tanto cariño demostrado, me da mucha fuerza para continuar. Gracias a todos" respondia a FM Peumayén, la radio de Fernandez Oro que narraba en vivo todo lo que iba ocurriendo. Una verdadera fiesta se estaba viviendo en el sitio que la habia visto nacer. Muchos se acercaban para recordarles vivencias de cuando ella era chiquita, otros le repetian "te vi en la tele, sos igual, grande campeona". Una vez que recorrió las principales arterias orenses, la autobomba se estacionó en el municipio donde su intendente Juan Reggioni la recibió en la vereda y la invitó a subir a su despacho. Reggioni se mostró muy emocionado y le recordó a la púgil "esta es tu casa Betiana, estamos para lo que necesites. Gracias por lo que has hecho por nosotros, Gracias de verdad". Fueron unos 30 minutos de charla amena entre Viñas y Reggioni, amenizada con el tradicional "mate criollo" solicitado por la misma campeona.
Además de las fotos con todos quienes se acercaban, los regalos eran incesantes "me llevo de todo, pero lo más importante es el afecto de la gente". Asi se expresaba la verdadera héroe, quien hace unos dias comenzó a escribir un capitulo más en su historia deportiva y agradecida por todo el apoyo recibido, volvió al lugar de sus padres y donde vivió su niñez.
Por Miguel Ángel Parra
Mientras tanto, los primeros medios iban llegando y narrando lo que iba aconteciendo desde el cuartel de bomberos, quienes aprestaban detalles para poner a punto la autobomba que la pasearía por toda la localidad. Alrededor de las 11,30 hs partió la caravana con Betiana saludando y mostrando el cinturón logrado hace unos dias en Las Heras, Mendoza ante la uruguaya Paola Ibarra. Mucha alegría y regocijo de todos los vecinos que se apostaban al paso del móvil de bomberos voluntarios para ver y saludar a su hija pródiga. "Queria llorar y no podía" comentaba la boxeadora con relativa emoción. "No lo puedo creer, tanto cariño demostrado, me da mucha fuerza para continuar. Gracias a todos" respondia a FM Peumayén, la radio de Fernandez Oro que narraba en vivo todo lo que iba ocurriendo. Una verdadera fiesta se estaba viviendo en el sitio que la habia visto nacer. Muchos se acercaban para recordarles vivencias de cuando ella era chiquita, otros le repetian "te vi en la tele, sos igual, grande campeona". Una vez que recorrió las principales arterias orenses, la autobomba se estacionó en el municipio donde su intendente Juan Reggioni la recibió en la vereda y la invitó a subir a su despacho. Reggioni se mostró muy emocionado y le recordó a la púgil "esta es tu casa Betiana, estamos para lo que necesites. Gracias por lo que has hecho por nosotros, Gracias de verdad". Fueron unos 30 minutos de charla amena entre Viñas y Reggioni, amenizada con el tradicional "mate criollo" solicitado por la misma campeona.
Además de las fotos con todos quienes se acercaban, los regalos eran incesantes "me llevo de todo, pero lo más importante es el afecto de la gente". Asi se expresaba la verdadera héroe, quien hace unos dias comenzó a escribir un capitulo más en su historia deportiva y agradecida por todo el apoyo recibido, volvió al lugar de sus padres y donde vivió su niñez.
Por Miguel Ángel Parra
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